6 de Julio de 2025
Tema: Estar quietos y confiar en Jehová
• Salmos 46: 10
“Estad quietos, y conoced que yo soy Dios;
Seré exaltado entre las naciones, enaltecido seré en la tierra.”
• Introducción:
Vivimos en un mundo lleno de ruido, prisas, estrés y ansiedad. Queremos soluciones rápidas, respuestas inmediatas y resultados visibles. Pero hay momentos en los que Dios nos llama a hacer algo totalmente contrario: estar quietos.
¿Por qué? Porque en la quietud aprendemos a confiar verdaderamente en Jehová y a reconocer Su soberanía.
1. La quietud no es pasividad, es confianza activa
Estar quieto no significa no hacer nada; significa detener nuestras fuerzas humanas para dar paso al obrar de Dios.
Ejemplo bíblico: Moisés ante el Mar Rojo – •Éxodo 14:13-14
"No temáis; estad firmes, y ved la salvación que Jehová hará hoy con vosotros... Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos."
Muchas veces luchamos con nuestras fuerzas, cuando Dios solo nos pide: “Descansa en mí.”
2. Confiar en Jehová es recordar quién es Él
“Conoced que yo soy Dios”. La quietud nos lleva a un lugar de intimidad con Dios, donde podemos recordar:
• Él es Todopoderoso
• Él es Fiel
• Él no miente
• Él tiene el control
Cuando estás quieto, puedes escuchar Su voz.
• Isaías 30: 15 – "En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza."
3. Dios obra en el silencio y en la espera
A veces pensamos que si no vemos movimiento, Dios no está haciendo nada. Pero es en lo invisible donde Dios hace las obras más profundas.
Ejemplo: Jesús dormía en la barca en medio de la tormenta (Marcos 4:39). Mientras los discípulos temían, Jesús estaba en paz.
Dios te dice hoy: “Mientras tú te aquietas, Yo peleo tus batallas.”
• Aplicación personal:
¿Qué área de tu vida necesita que te aquietes y confíes? ¿Finanzas? ¿Salud? ¿Familia? ¿Ministerio?
Haz una pausa, reconoce que Dios es Dios, y dile: “Señor, me aquieto, confío y espero en Ti.”
• Conclusión:
La verdadera fe se prueba en la espera y en la quietud.
Cuando te detienes, no pierdes tiempo; ganas perspectiva, ganas paz y ganas dirección. Dios está contigo. Él será exaltado, no importa lo que veas ahora.
• Oración final:
Señor, enséñame a estar quieto ante tu presencia. Quítame la ansiedad, quìtame el temor, quita de mi la necesidad de controlar todo. Hoy decido confiar en Ti, porque sé que Tú eres Dios, y no hay otro como Tú. Pelea por mí, Señor, y glorifícate en mi vida. En el nombre de Jesús. Amén.
¡Bendiciones!
Lucecita Gonzàlez
Autora del libro: Testimonios del poder de Dios
Revista Digital Cristiana "La vara de almendro PR "
Comentarios
Publicar un comentario
¡Dios te bendiga! Gracias por tu visita, por tu apoyo y por tu comentario. Revista Digital Cristiana La Vara De Almendro PR #RDCLVDAPR